barrio cerro alarcón

Experiencias y reflexiones sobre vivir en una entidad urbanística que no debería serlo


Postre ‘Las Disoluciones’  

(O cómo derretir entidades urbanísticas caducas en 8 pasos)

Ingredientes para 4 porciones de dulce protesta: 

  • 250g de galletas viejas como entidades urbanísticas.  
  • 100g de mantequilla derretida especial para deshacer lo rígido y fundir intereses creados.  
  • 400ml de crema líquida de la que hace fluir las reclamaciones de los vecinos. 
  • 200g de chocolate negro al 70% de falta de esperanza.  
  • 1 pizca de sal marina gruesa como cuota de EUCC.  
  • Mermelada de naranja amarga con notas de doble tributación injusta.  
  • Merengue quemado al estilo paciencia vecinal. 
  • Frutas rojas frescas de nuevas ideas que no prosperan. 

Preparación: 

  1. Triturar las galletas hasta convertirlas en las migajas a las que se deben reducir las obsoletas EUCs.  
  1. Mezclar con la mantequilla derretida y prensar en moldes individuales. Utilizar la misma presión con la que nos imponen las cuotas.  
  1. Refrigerar 10 minutos, el tiempo que tarda el Ayuntamiento en ignorar una queja. 
  1. Calentar la crema, disolver el chocolate… y confiar en que la acción vecinal lo derrita todo.  
  1. Añadir la sal y remover, como remueve la doble imposición a los vecinos de las urbanizaciones.  
  1. Verter sobre la base de galletas y dejar enfriar al menos 2 horas, sin alcanzar el punto de congelación de los plazos legales que no se cumplen.  
  1. Cubrir con la mermelada de naranja amarga.  
  1. Decorar con las frutas rojas y el merengue de paciencia vecinal chamuscada

¡Servir frío… como la atención al vecino! 

Opcional: se puede añadir un glaseado de silencio administrativo (azúcar glas y agua tibia… que se evapora como la intención de atender nuestras reclamaciones). 

Aunque la receta está, al igual que los expedientes para acabar con las EUCs, en fase de ‘estudio preliminar’, las ‘Disoluciones’ se postulan como postre oficial de Valdemorillo.  

Ahora solo falta que algún concejal se atreva a probarlo (y que no le indigeste la metáfora). 

¡Gracias por leernos! Y a las juntas rectoras, que les aproveche tanto como nuestras cuotas. 

¡¡Feliz verano!! Ojalá que el Ayuntamiento aproveche el cambio de armario típico de la época para abandonar en el desván unas entidades obsoletas y dañinas, que le impiden ser el ayuntamiento de todos y para todo. Ojo, porque no quiere evitarlo.



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