barrio cerro alarcón

Experiencias y reflexiones sobre vivir en una entidad urbanística que no debería serlo


De conserjes a manitas de urbanización

Con la tramposa transformación de los empleados de las EUCC, las juntas reconocen que su contratación es inadecuada 

A nada que te fijes, puedes ser testigo de cómo las juntas rectoras de las entidades urbanísticas de Valdemorillo se han puesto manos a la obra para ofrecer a sus vecinos vigilancia y conserjería sin que lo parezca [porque ya sabes que no son asuntos propios de EUCC].

Así que ahora andan las juntas ocupadísimas cambiando los antiguos rótulos de ‘conserjería’ por unos nuevos de ‘mantenimiento 24 horas’ o poniendo vinilos reflectantes en las garitas para que no se vea al conserje/vigilante de turno desde el exterior. Y recordando a sus vecinos en emails y chats que ya no deben referirse a los empleados como conserjes o guardas, aunque sigan actuando como tales. 

Dicen los malpensados que las juntas se están marcando un ‘gatopardo’ de manual: cambiar para que nada cambie. Pero lo cierto y verdadero es que estos cambios, por cosméticos que sean, suponen el reconocimiento por parte de las juntas rectoras de que las EUCCs no pueden tener ni vigilancia ni conserjería. Y, por tanto, que lo han hecho mal, rematadamente mal, durante todos estos años, y que la forma en la que han contratado a empleados y empresas de servicios no es la adecuada para una EUCC. De hecho, la propia contratación de conserjería y/o vigilancia nunca debió producirse en formato EUCC. ¡Albricias! Bienvenido sea el reconocimiento. 

Eso sí, esperamos que, si en su momento se contrató mal, ahora se repare bien. Lo mejor posible. Porque los empleados merecen la seguridad de estar correctamente contratados y los vecinos merecemos recibir los servicios que dicen prestarnos. Mantenimiento es mantenimiento, nada que ver con esconderse en una garita o hacer rondas de vigilancia varias veces al día mientras la suciedad se acumula en la urbanización o las malas hierbas se comen las aceras. Hacer una cosa por otra, además de feo, es un engaño.  

Queremos suponer que el ayuntamiento, en su irrenunciable labor de control como órgano tutor, estará vigilando este chusco proceso. ¿No es así, ayuntamiento? Suponemos que tus funcionarios ya habrán pedido los contratos de empleados y empresas de servicios para comprobar que todo es correcto, y que, por ejemplo, no hay ni un solo empleado de finca urbana que haga labores de mantenimiento. O, peor aún, que siga haciendo lo de siempre.  

Como sabes, ayuntamiento, el convenio de personal de fincas urbanas es tozudo a este respecto —llámalo tiquismiquis, si prefieres— e impide que un conserje realice trabajos de fontanería, jardinería y, en general, cualquier otra labor de interés para una EUCC. Te dejamos aquí el enlace al convenio por si quieres confirmarlo en su punto 3, de exclusiones.  

Asimismo, suponemos, ayuntamiento, que habrás dado las instrucciones oportunas para que se suprima el injustificable turno de noche, que ni siquiera tú, la institución a la que sustituyen las entidades urbanísticas, tienes. Y no, no cuela el patético argumento de que hay que velar por si revienta una tubería durante la noche.  

En cualquier caso, gracias a la estrategia para camuflar conserjes de las juntas rectoras, de golpe andamos sobrados de ‘manitas de urbanización’ en nuestro pueblo.  A ojo de buen cubero, debemos de tocar a uno por cada cien habitantes de urbanización. Hablamos de manitas para mantenimiento de lo público, porque hasta las juntas ya saben que las entidades urbanísticas hacen solo y exclusivamente lo que harían los ayuntamientos en caso de no existir la EUCC.  

Así las cosas, nos preguntamos si quienes vivimos en las urbanizaciones somos conscientes de estar pagando —aparte de nuestros impuestos— el sueldo de empleados privados cuyo puesto de trabajo sólo se justifica si hacen labores de mantenimiento para el ayuntamiento.  Y nada más, porque cualquier otra cosa que hagan es impropia de una EUCC. Es decir, los vecinos quieren conserjes o vigilantes, pero con la cuota de la EUCC sólo pueden pagar personal para que haga el trabajo que el ayuntamiento debería hacer de oficio, por mandato legal. ¿De verdad somos conscientes del tamaño del despropósito? Porque si lo somos, estamos tardando en pedir a gritos la disolución de nuestras entidades urbanísticas. 

¡¡¡ LA (DI)SOLUCIÓN QUE MERECEMOS, YA!!! 

Ah, y para los que crean que la disolución es el fin del mundo, al menos de su mundo conocido, les recordamos que las EUCCs no pueden contratar conserjes ni vigilantes, es cierto, pero las asociaciones de propietarios, sí. Estamos tardando 

Imagen de julos en Freepik 



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